Qué ver en Suiza

St. Moritz

Cuna del turismo alpino y escenario de dos Juegos Olímpicos de Invierno, es la ciudad turística más conocida de Suiza. Un viaje a St. Moritz es el paradigma de los viajes de lujo. Situada a 1856 metros sobre el nivel del mar en la Alta Engadina, ha sido durante mucho tiempo el refugio invernal elegido por la realeza, las celebridades y los amantes de la moda adinerados desde su establecimiento como destino de ocio en 1864. Un hotelero local invitó a unos huéspedes británicos a visitar St. Moritz, de modo que si no quedaban impresionados con la ciudad, les pagaría felizmente su estancia. Por supuesto, los invitados se enamoraron al instante de los encantos alpinos y los deportes de invierno, lo que marcó el comienzo del ascenso a la fama de esta urbe top.

Bendecida con el sol durante más de 300 días al año, St. Moritz ofrece excelentes pistas de esquí, alojamientos de lujo, tiendas y restaurantes de alto nivel. Ubicada en la ladera sur de los Alpes de Albula y con vistas al cristalino lago St. Moritz, alberga 350 kilómetros de pistas vírgenes y una infraestructura para este deporte de última generación. Corviglia y Piz Nair son las pistas más empinadas y las favoritas de los esquiadores más talentosos. El esquí de fondo también es una actividad popular y una excelente manera de descubrir los paisajes de la región de Engadina. Incluso en la temporada de verano, este destino está lleno de visitantes que pueden disfrutar del golf alpino, de las carreras de caballos sobre césped blanco y de la suave navegación en el lago; por lo que es apta para visitar en cualquier época del año. Además, está bien conectada con Zúrich y también es la terminal del famoso ferrocarril Glacier Express.

St. Moritz ofrece una experiencia vacacional completa, con muchas cosas para poder hacer dentro de la propia ciudad, desde asistir a representaciones de ópera repletas de estrellas hasta divertirse sobre las pistas de patinaje sobre hielo o visitar una gran cantidad de galerías de arte y museos. A pesar de la reputación de lujo de los resorts, no es un destino puramente exclusivo y hay opciones de alojamiento que se adaptan a la mayoría de los presupuestos.

Qué ver en Sant Moritz:

Un paseo por las elegantes calles de St. Moritz revela que hay una gran variedad de cosas para poder ver y hacer, como visitar el Museo Segantini, ubicado dentro de un hermoso edificio de piedra, coronado por una cúpula abovedada. En el interior se puede admirar la brillante obra de arte de Giovanni Segantini, que retrata con elegancia los paisajes de los Alpes y la región de Engadina.

A tiro de piedra se encuentra la Torre Inclinada, un hito en la ciudad. Al igual que la de Pisa, se inclina hacia un lado más de 5 grados. Data del siglo XII y formó parte de un complejo de iglesias más grande.

Cualquiera que esté interesado en Suiza estará familiarizado con las historias de Heidi, una de las series de libros para niños más populares del mundo. La cabaña de montaña original utilizada en el rodaje de la primera película de esta entrañable niña está situada justo encima de la ciudad y es uno de los lugares más populares para ver en St. Moritz.

Conocido por su influencia en los deportes de invierno, unas vacaciones en St. Moritz están incompletas si no se visita la legendaria Cresta Run, la famosa pista de trineo de esqueleto de hielo, construida en 1884 y considerada el lugar de nacimiento del esqueleto moderno. Aquellos que se atrevan a deslizarse por ella pueden alcanzar velocidades de hasta 138 kilómetros por hora. Toda una comunidad de corredores de trineo nació a raíz de su apertura, lo que dio lugar al Cresta Club House.