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Qué comer en
Jordania
Qué comer en Jordania
Salir de compras por Jordania es una de las mejores formas de conocer su cultura, historia y tradiciones. Los zocos de las grandes ciudades como Amán están repletos de mercancías de todo tipo donde se pueden encontrar desde ropa hasta las afamadas especias. Debido a que son mercados locales donde los jordanos realizan sus propias compras, los precios son bastante económicos y en algunos lugares, están abiertos a regatear el precio. Entre los productos más característicos del país se encuentra su popular cerámica blanca y azul elaborada a mano, los mosaicos, las alfombras o los tapices. El oro y la plata también son bienes que han adquirido gran prestigio en el país, aunque en muchas de las tiendas se limitan a vender bisutería. La moda jordana también es muy particular. En muchos de los puestos callejeros se pueden encontrar keffiyeh, el típico pañuelo de cuadros, o túnicas blancas para hombre. Aunque sin duda, si hay un producto que no se puede dejar pasar por alto debido a su valor y popularidad son los cosméticos y productos elaborados con agua del Mar Muerto.
Dulces
La mayor parte de los dulces, al igual que en la mayoría de países árabes, se elaboran a partir de miel, pistachos, almendras nueces y piñones. Entre la gran cantidad de delicias que podemos encontrar destaca el Qatayif: una especie de crepe frita u horneada rellena de frutos secos, especias, coco y queso dulce. Otro dulce muy extendido y parecido es el baklawa, un típico tentempié elaborado con pasta de hojaldre rellena de frutos secos y pistachos y empapado en almíbar de rosas o naranjas.
Falafel
Los garbanzos son de nuevo la base de este otro aperitivo que se puede encontrar tanto en puestos callejeros -ideal para llevar-, como en restaurantes, donde se sirve en plato. El falafel es una especie de albóndiga de garbanzos picados que una vez cocidos junto a algunas verduras y especias se fríen y se sirven junto a una salsa de yogurt, generalmente envueltos en pan de pita.
Fattah
Otra especialidad excelente que no podemos perdernos es el fattah, un pan crujiente que en ocasiones también podremos encontrar frito, y que empapado en agua de cocción, se sirve recubierto de hummus o berenjenas y aliñado con una mezcla de yogurt, ajo y limón.
Ful
Empezar el día con un buen desayuno es muy importante. El ful es uno de los platos más particulares del desayuno jordano, sin embargo habremos de esperar generalmente hasta media mañana para encontrarlo en los restaurantes. Se trata de una sopa hipercalórica y muy energética elaborada a base de puré de alubias y aderezada con tomillo ajo y limón; ideal sobre todo, si el día se presenta largo.
Kuftah
No se trata de un plato fácil de encontrar en la mayoría de los restaurantes, pero es una de las recetas campesinas más típicas de la zona. El kuftah consiste en una receta de carne de cordero triturada y cocinada al horno en una salsa a base de crema de sésamo y/o estofada con tomates y cebollas.
Kunafah
Uno de los postres más conocidos y apreciados en la cultura jordana es la Kunafah. Cocida al horno, se trata de una especie de tarta elaborada a partir de una crema de queso dulce, perfumada con agua de rosas y recubierta con algunos hilos de masa sobre los que se vierte una buena de cantidad de jarabe de miel y azúcar antes de ser horneada.
Mansaf
Sin duda el plato más tradicional de la cultura jordana es el mansaf, hasta el punto que se ha llegado a considerar el plato nacional del país. Se trata de un plato de origen beduino por lo que también podremos encontrarlo en muchos de sus países vecinos. Su principal ingrediente es el cordero, que se sirve sobre una base de arroz aromatizado con cúrcuma y aliñado con un yogurt seco denominado jameed. El mansaf se suele presentar en el centro de la mesa, y manda la tradición que los comensales tomaran su parte directamente de él con la mano derecha.
Maqlubah
Con el cordero, a parte del mansaf, se cocina un plato muy apreciado que recibe el nombre maqlubah, y que también puede elaborarse a base de pollo. Se trata de un estofado de carne acompañado de especias y verduras; generalmente berenjena y coliflor. Se sirve sobre un lecho de musakhkan, una especie de pan árabe relleno de carne previamente aliñada con zumaque, aceite cebolla y piñones tostados.
Mezze
También denominada mazahh en algunas zonas, este plato consiste en una serie de entrantes a modo de aperitivo que combina varias de las especialidades más típicas del país. Entre ellas encontraremos el hummus, una pasta de garbanzos y sésamo aliñada con aceite de oliva, el mutabbal, similar al primero pero elaborado a partir de una base de berenjenas o el waraq inab, unas hojas de vid rellenas de arroz y carne picada.
Pan
El pan o al-jubz, en Jordania generalmente tiene forma redonda y suele ser usado por los árabes a modo de cuchara para coger la comida del plato y llevársela a la boca. En las zonas rurales suele elaborarse en hornos de leña y generalmente se aromatiza con zataar, una mezcla de especias muy popular en todo oriente medio compuesta de tomillo, zumaque, semillas de ajonjolí y sal. También suele llevar hierbas aromáticas tales como: ajedrea, mejorana, orégano, hisopo, comino o hinojo. Para los beduinos en cambio el shark o pán ácimo, consiste en una delgada lámina de masa que se cocina sobre un domo metálico previamente calentado al fuego de leña, y que tarda muy poco tiempo en prepararse.
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