7 playas rodeadas de naturaleza

Sin grandes aglomeraciones, estas playas de arena fina y aguas cristalinas se caracterizan por el entorno que las rodean, con espesa vegetación o imponentes acantilados. En algunos casos, su atractivo son los propios animales que las habitan.

Boulders Beach, Sudáfrica

Situada cerca de la localidad de Simon´s Town, en Ciudad del Cabo, se encuentra esta playa cuya principal particularidad es que está habitada por pingüinos. Es su mayor atractivo turístico, aunque hacerse un hueco para colocar la toalla no es tarea fácil. Esta colonia que ha popularizado el lugar lleva establecida en esta parte de África desde 1982. La riqueza de su entorno fue proclamado Parque Nacional Table Mountain, llamado así por la montaña con forma de mesa que destaca sobre el resto. Hoy, el lugar también es frecuentado por los amantes de las aves, ya que cuenta con varios lugares estratégicos para su avistamiento.

Lanikai Beach, Estados Unidos

En la costa este de la isla de Oahu, en Hawái, se encuentra esta playa que durante años fue considerada por diversas publicaciones internacionales como la más bonita del mundo. Algunas de las razones son sus increíbles vistas a los islotes de Nā Mokulua – islas mellizas – que sirven como refugio para aves, de ahí a que su acceso esté restringido por las autoridades. Otro motivo de su popularidad tiene que ver con que la playa permanece prácticamente inalterada, a excepción de por la urbanización de lujo que la antecede. No cuenta con baños públicos, salvamento ni aparcamiento. De hecho, su situación hace que esté bastante resguardada de la carretera gracias a un bosque de palmeras.

Trunk Bay, Islas Vírgenes

Considerada como una de las playas más espectaculares del mundo, Trunk Bay se caracteriza por la extensa costa de arena que rodea toda la bahía. Resguardada por espesa vegetación, esta postal paradisíaca se encuentra en la isla de St. John y forma parte del Parque Nacional de las Islas Vírgenes. Sus fondos marinos, compuestos de corales y gran biodiversidad animal, son ideales para practicar esnórquel y submarinismo.

Alter do Chão, Amazonas

Conocido como el Caribe del Amazonas, esta idílica playa de arena blanca y aguas turquesas se encuentra rodeada de la más abrupta vegetación. Su emplazamiento, en medio de la selva, hace de ella un lugar único en el mundo. La desventaja es que no siempre existe, pues depende del nivel del agua procedente del lago Tapajós, que suele coincidir con finales de septiembre. A pesar de su temporalidad, Alter do Chão no es un paraíso deshabitado, sino que se trata de un pueblo de pescadores fundado a principios del siglo XVII sobre un antiguo poblado indígena. Aunque su mayor atractivo es la playa de apariencia caribeña, si no se logra coincidir con la época de sequía el lugar cuenta con otros atractivos como el bosque Floresta Encantada, la Lagoa Verde o Ponta das Pedras.

Playa de Balos, Grecia

Convertido en parque natural para proteger su entorno y biodiversidad, la playa de Balos es una de las joyas que guarda la isla de Creta, en Grecia. Situada al noroeste de Kissamos, esta laguna de agua turquesas está rodeada de bancos de arena blanca cuya tonalidad se va volviendo rosa según se va llegando a la zona de los corales. Sus fondos marinos son ideales para practicar el esnórquel o el submarinismo. Algunas de las especies más destacadas del lugar son las tortugas y las focas monje. Las cuevas de sus alrededores, además, son el refugio ideal para algunas aves como los halcones.

Dona Ana, Portugal

Situada en el Algarve portugués, la playa de Dona Ana se trata de una pequeña cala rodeada de coloridos acantilados que hacen que el lugar sea uno de los más espectaculares de la costa portuguesa. Las rocas que emergen del mar, bañadas por aguas cristalinas, le dan un aspecto pintoresco al paisaje. A ella se puede acceder a pie desde la ciudad de Lagos, cuyo paseo no es más de 25 minutos. Para bajar hasta la arena, las paredes rocosas cuentan con escaleras. Un lugar único que, debido a su belleza, cada año goza de mayor popularidad.

Bai Dai, Vietnam

Hasta hace unos años, este paraíso cristalino de Vietnam estaba restringido. Su ubicación en la isla de Phu Quoc, cercana a las bases militares del país, hizo que sólo unos pocos tuvieran permiso para acceder a ella. Aquí es donde se localiza Bai Dai, un remanso de paz de arena blanca y rodeada de espesa vegetación que ha hecho que hoy sea uno de los lugares más deseados del país. Llamada por aquel entonces como la playa más discreta del mundo, su apertura al turismo le ha permitido ganar popularidad, aunque para llegar hasta ella sigue siendo necesario un paseo en barco.