Gatos maneki-neko
Este gato japonés de la buena suerte es uno de los artículos más buscados por los viajeros en Japón. El original es un felino blanco con una de las patas levantadas hacia arriba, aunque los modelos pueden ser de lo más variados, pues los hay de colores, dorados o plateados. La mayor parte de las casas, restaurantes o establecimientos cuentan con uno de ellos, ya que atrae a la felicidad, el éxito, la prosperidad y el dinero. Aunque sus orígenes ha generado varias versiones, la más extendida es la historia en la que este gato salvó a un campesino llevándolo hacia el templo Gotoku-ji de Tokio, se dice que aquí es donde el original fue enterrado en el cementerio de gatos. Actualmente en el propio templo se venden, por lo que es uno de los mejores lugares para hacerse con uno de ellos.